El 15 de julio de 1930 Luis Felipe Monti sería el encargado de anotar el primer gol argentino en un mundial, jugado en Uruguay. Fue en la victoria 1-0 frente a la selección de Francia en el Parque Central de Montevideo. El gol lo marcó a los 36 minutos del segundo tiempo y así terminaría el encuentro, con triunfo argentino.
Ese día histórico, el técnico Juan José Tramutola paró el siguiente equipo titular: Angel Bosio en el arco, José María Della Torre y Ramón Alfredo Mutis en defensa; en el mediocampo Pedro Bonifacio Suárez, Luis Monti y Juan Evaristo, y en la delantera Natalio Perinetti, Francisco Varallo, Manuel Ferreira, Roberto Cherro y Marino Evaristo.
En ese Mundial Argentina terminaría en el 2º puesto de la tabla, tras caer en el partido definitorio frente al seleccionado uruguayo por 4 a 2. Cuatro años más tarde, Monti jugaría otra final del mundo, pero con la camiseta de Italia. Con la “azzurra” se coronaría campeón, convirtiéndose en el único futbolista en jugar dos finales con distintas selecciones, algo que hoy no está permitido.
“Doble ancho”, como era conocido en el fútbol, nació en Buenos Aires el 15 de mayo de 1901 y falleció en Escobar, donde vivía junto a su esposa e hijo, el 9 de septiembre de 1983. El polideportivo de Belén lleva su nombre a modo de homenaje a su trayectoria. Como jugador vistió las camisetas de Huracán, San Lorenzo y Juventus de Italia.
Monti cabecea, en el Mundial 1930 en Uruguay